Pablo Lucio Paredes: ITT: la locura absoluta | Columnistas | Opinión

Mucho se ha hablado del tema, y hay que seguirlo haciendo, porque no es posible que la sociedad ecuatoriana entre en esta locura, de la magnitud que resume Primicias: “… dejar de operar el campo petrolero ITT (…) no solo implica apagar 247 pozos operativos, sino desmantelar alrededor de 6.000 bienes, equipos y estructuras, como tanques, generadores, equipos de producción, oleoductos y más”. Se estima que tomará unos cuatro años, con un enorme costo. Pero lo más grave y contradictorio: ¡es muy probable que los impactos ambientales, de desmontar y movilizar, serán muy importantes, a lo que se agregará la ocupación posterior de esos espacios por colonos o madereros informales irresponsables! El impacto será mayor que dejar la operación… Al menos ¿ha visto usted algún estudio serio y completo (ojo, “serio y completo”, es decir, no hecho por ellos mismos) de YASunidos y compañía sobre el impacto que ha tenido la actividad petrolera en el área y el impacto de la salida?

Cuánto y hasta cuándo seguirá produciendo petróleo el ITT

Usted podría pensar: bueno, fue una decisión democrática de la mayoría de los ecuatorianos, y es cierto que fue una decisión de los “dueños” del petróleo que somos los ciudadanos. Dejo de lado, porque no es mi campo, explicaciones de prominentes abogados sobre que la Corte Constitucional no debió dar paso a esta pregunta porque las consultas populares (aunque sean democráticas) no pueden abarcar cualquier tipo de decisión. Recuerdo el argumento de que la gente dijo sí a dejar “el crudo bajo el subsuelo” y podemos entonces seguir “produciendo petróleo del subsuelo”, algunos dirán, palabras más, palabras menos, “qué importa”, pero no es así, la precisión de las palabras es esencial, si no en la vida diríamos y firmaríamos cualquier cosa “porque ya veremos cómo lo interpretamos”. Critico las consultas populares porque tienen tantas preguntas y son tan manipuladas que todos sabemos que las respuestas no reflejan opiniones claras y reales, por eso siempre he creído que consultas de gran impacto como esta (o como el Brexit en Inglaterra, por ejemplo) deberían hacerse dos o tres veces con una separación de algunos años para que la gente exprese su opinión más meditada, así es como tomamos decisiones importantes en la vida, dándoles tiempo para madurar, “no de primerazo”, aunque entiendo que ese es el método que tenemos por ahora y así lo hemos aceptado, y no podemos pensar que las consultas son buenas cuando dan resultados que nos gustan, o lo contrario.

Daniel Noboa pide a la Corte Constitucional iniciar fase de seguimiento al dictamen de la consulta popular del Yasuní ITT

Ecuador debe empujar petróleo y minería de calidad (no la minería ilegal). Sí se puede hacer, respetando razonablemente el impacto ambiental y humano. La palabra “razonable” es importante porque si queremos poner “impacto nulo”, entonces debemos abandonar cualquier actividad humana en el planeta. Cualquiera. Más bien debemos discutir cómo utilizar esos recursos que la naturaleza nos ha dado y no pueden ser desperdiciados en un país con tantas necesidades. Creo hay una manera positiva para evitar la “maldición de los RR. NN.” que acaba empobreciendo, como quien gana la lotería y a los pocos años está peor que antes: que esos fondos capitalicen un buen sistema de jubilación reformado (no el actual). De esta manera los RR. NN., que son de todos, irían a apoyar una mejor vejez de (casi) todos. (O)

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