Una reunión familiar terminó en tragedia. La familia de Walter Macías Holguín, de 19 años, se había encontrado para hacer una comida que incluía una parrillada en Manabí.
Uno de sus allegados preparaba el menú e intentó encender una madera con fósforos, pero no lo consiguió. Él le sugirió poner un poco de gasolina y empezó a rociar el combustible por la madera, pero la mano del allegado comenzó a quemarse y lanzó el objeto con el que esparcía el líquido. Eso le cayó a Walter, que estaba recostado en una hamaca.
‘Se pasa un viacrucis en demandas, pagos, que no deberíamos estar envueltos en eso, sino en atención’: al menos 10 prestadores externos han tenido que cerrar operaciones a la espera de haberes pendientes del IESS
Rápidamente el fuego empezó a consumir las piernas del joven de 19 años. Uno de los familiares le dijo que se lanzara a un espacio en el que había lodo y así lo hizo, con eso las llamas dejaron de quemarlo. Sin embargo, tuvo quemaduras que requirieron atención especializada.
Del suceso han pasado seis meses, cuatro de los cuales estuvo internado en el Hospital de Especialidades de Portoviejo.
El joven está contento de haber regresado a su casa, aunque su recuperación continuará. “Ha sido difícil”, dijo sobre el proceso de recuperación. Debe ir a controles dos veces a la semana.
En sus planes está ir a la universidad este año. Antes de lo que le sucedió quería estudiar Mecánica, pero ahora escogerá Medicina para ayudar a las personas. “Ya sé cómo es el sufrimiento de las personas”, expresó.
Entregan las últimas 15 nuevas ambulancias para fortalecer el servicio de atención prehospitalaria en Ecuador
Uno de los inconvenientes que aún tiene es en la rodilla, por ese motivo su deporte favorito, el fútbol, deberá esperar al menos un año por él.
Si bien la atención fue de lo mejor, recordó que tuvieron que comprar algunos medicamentos. Según el Ministerio de Salud Pública (MSP), en términos económicos para el Estado significó alrededor de $ 100.000 el tratamiento integral y especializado del joven.
Macías estuvo en el Hospital de Especialidades de Portoviejo debido a quemaduras por fuego del 30 % de la superficie corporal.
A lo largo de su proceso, indicó el MSP, se sometió a 25 cirugías en las que se utilizaron técnicas avanzadas de cirugía plástica y reconstructiva para recuperar el daño y optimizar su recuperación. Recibió además fisioterapia y apoyo psicológico.
Gustavo Gonima, médico de ese hospital y especialista en cirugía plástica y reconstructiva, mencionó que es un caso muy importante porque ha sido una superficie mayor del 20 % la que presentó quemaduras.
La cara posterior de las extremidades inferiores, glúteos, brazos e incluso el pene tuvieron quemaduras. Fue intervenido en varias ocasiones.
El galeno señaló que fue un desafío desde los puntos de vista clínico y quirúrgico debido a las secuelas que se podrían generar.
Las secuelas del COVID prolongado aún aquejan a pacientes en Ecuador: universidades estudian los impactos
Gonima manifestó que Macías está haciendo la rehabilitación y debe hacerse revisiones continuas. El médico debe supervisar el estado del chico dado que las quemaduras causan cicatrices, por eso los controles deben durar al menos dos meses adicionales.
El especialista dijo que las múltiples cirugías tuvieron como objetivo darle cobertura a la parte posterior de las piernas.
Entre las consideraciones que debe tener en cuenta Walter, a pesar de que puede hacer su vida de manera normal, es evitar, por ejemplo, la exposición solar. (I)