La Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés) de EE.UU. prohibió este martes los vuelos comerciales a Haití tras los ataques a tiros que sufrieron el lunes dos aeronaves de las compañías estadounidenses Spirit y JetBlue desde Puerto Príncipe, capital del país caribeño.
La agencia federal emitió hoy una notificación en la que daba a conocer que todos los operadores estadounidenses quedaban prohibidos de volar a Haití durante los próximos 30 días, “debido a los riesgos asociados con la continua inestabilidad de seguridad” en la citada nación, que padece una crisis social y política.
El anuncio se da un día después de que un avión operado por Spirit y procedente de Fort Lauderdale, en el sur de Florida (EE.UU.), fuera baleado desde tierra cuando se acercaba al Aeropuerto Internacional de Toussaint Louverture, en Puerto Príncipe, un incidente que dejó a un miembro de la tripulación con heridas leves y obligó a desviar la nave hasta República Dominicana.
Como resultado del ataque, la aerolínea suspendió sus vuelos a Haití hasta diciembre, como lo hicieron también otras compañías como American Airlines y JetBlue, esta última también víctima de un ataque con disparos.
Según informó esta aerolínea estadounidense, el lunes uno de sus aviones fue tiroteado cuando acababa de despegar del aeropuerto de Puerto Príncipe con destino a Nueva York, sin que se reporten heridos en este caso.
“Si bien la tripulación no reportó problemas inicialmente, una inspección posterior del vuelo confirmó más tarde que el exterior de la aeronave había sido alcanzado por una bala”, dijo el portavoz de JetBlue Airways, Derek Dombrowski, a medios de prensa.
El aeropuerto internacional Toussaint Louverture, en Puerto Príncipe y el principal de Haití, fue cerrado el mismo lunes debido a una intensificación de la violencia por parte de las bandas que controlan el área metropolitana de la capital, en coincidencia con el nombramiento de un nuevo primer ministro, Alix Didier Fils Aimé, por parte del Consejo Presidencial de Transición, que destituyó a Garry Conille.
El Toussaint Louverture estuvo cerrado al tráfico comercial entre febrero y mayo pasado, luego de que las bandas armadas incrementaran sus acciones de violencia contra la población, las instituciones, comercios y tomaran dos cárceles densamente pobladas de las que huyeron miles de prisioneros.
En una rueda de prensa, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, expresó este martes preocupación por la violencia en Haití. “Ciertamente estamos preocupados por el aumento de la violencia en Haití y lo relacionado con los vuelos comerciales y lo que ocurrió allí”, aseveró la portavoz. (I)