Una nueva ronda de lluvias torrenciales ha puesto en vilo a la costa mediterránea de España.
Este jueves, cinco regiones del país han amanecido bajo algún grado de alerta, aunque solo una (Valencia) lo ha hecho en rojo, que es la máxima. Esto debido a desde el miércoles han caído 150 litros de agua por metro cuadrado en pocas horas, lo cual hacía temer que se produjeran desbordamientos de ríos e inundaciones repentinas.
El sur de Málaga, el este de Tarragona y la zona litoral de Valencia han sido las zonas más afectadas por una nueva Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA).
Hace dos semanas una DANA causó devastadoras inundaciones en Valencia, donde murieron más de 200 personas y miles de vehículos y viviendas resultaron destruidos.
La Agencia Estatal de Meteorología de España (AEMET) envió una alerta masiva a los teléfonos celulares de los habitantes de la sureña provincia de Málaga pasadas las 22:00 hora local (21:00 GMT) del martes por la noche advirtiendo del “riesgo extremo” que se avecinaba.
El miércoles algunos canales pluviales de la turística zona ya mostraban la primera crecida desde horas de la mañana.
Las precipitaciones han obligado a las autoridades a desalojar a unas 4.210 personas de sus hogares, de las cuales 3.000 ya habían pasado su segunda noche consecutiva en albergues, reportó el diario madrileño “El País”.
Asimismo, los colegios y universidades en Málaga, Valencia y algunos municipios de Cataluña han suspendido sus clases, mientras que algunos centros de salud y el grueso del comercio han cerrado sus puertas.
Las conexiones ferroviarias entre Málaga y Madrid y Barcelona también han sido interrumpidas y algunas autopistas permanecen cerradas al tránsito automotor.
Las precipitaciones en Málaga, en particular en su capital, han traído malos recuerdos a sus habitantes. Las lluvias casi han coincidido con la conmemoración del 35 aniversario de las registradas en 1989, en las cuales fallecieron seis personas y que eran consideradas las más devastadoras.
El miércoles las autoridades pidieron a los residentes de otras zonas aledañas que buscaran terrenos más elevados donde refugiarse.
“PREVENIR antes que curar. Esa es la premisa que vamos a seguir en todo momento. Sé que la provincia de Málaga está, en buena medida, paralizada con las medidas adoptadas por los técnicos; pero el objetivo de todos es minimizar el impacto de la DANA. Mucha precaución, por favor”, afirmó el presidente de la comunidad autónoma de Andalucía, Juan Manuel Moreno, en su cuenta de X.
En Valencia, donde el gobierno regional ha sido duramente criticado por su actuación en la DANA de finales de octubre, las autoridades cerraron el puerto de carga y emitieron avisos para la población.
En esta región, que todavía no se recupera de los estragos de las lluvias de hace dos semanas, se registraron nuevas precipitaciones, las cuales dejaron hasta 90 litros por metros cuadrados en municipios como el costero de Cullera, reportó la prensa local.
Este nuevo fenómeno climatológico hacía temer que nuevos daños de consideración, debido a las cantidades de barro que permanecen en las calles y al estado de la red de alcantarillado, admitió Rosa Tauris, portavoz del comité de emergencias.
César Cabrera, de 32 años, un trabajador de alcantarillado de Pamplona que está prestando servicio en el municipio valenciano de Paiporta, el epicentro de la emergencia de Valencia, dijo a Reuters que estaban trabajando a contrarreloj para desatascar los desagües por si los ríos volvían a desbordarse.
“Estamos limpiando todo lo posible para que no se complique, intentando que el agua pueda fluir”, explicó. “Esperemos que no llueva mucho y poder controlar un poco la situación”.
Las tormentas también obligaron a suspender temporalmente las labores de rescate de las personas que siguen desaparecidas frente a las costas de Valencia, informó el servicio de salvamento marítimo español.
Sin embargo, en algunas zonas del país la situación tiende a mejorar. Así, a primera hora del jueves, las autoridades de Protección Civil de Cataluña, región fronteriza con Francia, levantaron las restricciones al tráfico impuestas en cinco áreas y el servicio ferroviario ha comenzado a ser reestablecido.
También en Málaga y Granada las alertas han comenzado a ser levantadas en varias zonas, reportó el diario “El País”.
La DANA se forma cuando una zona de bajas presiones queda “aislada” del flujo principal de la corriente de chorro.
Esto significa que, en lugar de desplazarse a través de una región con relativa rapidez, permanece sobre la misma zona, provocando lluvias persistentes durante varios días.
El aire frío de las capas altas de la atmósfera se encuentra con el aire cálido procedente del Mediterráneo, lo que genera las condiciones de tormentas torrenciales.
