‘A ratos me he sentido un poco ecuatoriano’: Alberto Plaza y sus proyectos para celebrar 40 años de trayectoria musical | Música | Entretenimiento

Ha estado viniendo a Ecuador desde hace 30 años y en esas visitas ha construido un cariño inmenso con el país, “una relación que se ha ido forjando a base de canciones que la gente ha sentido propias”, dice el cantautor chileno-estadounidense Alberto Plaza, quien cuyo Tour Sin Fronteras llega al país en un concierto “minimalista y coloquial”, con la posibilidad de pedir canciones, este jueves 5 de diciembre en el Club Biblos de Samborondón.

Alberto Plaza: El aplauso me llega como un recuerdo

“Desde el primer día que aterricé me sentí muy acogido, ustedes son hospitalarios, es una tierra muy generosa, tal como es su gente. A ratos me he sentido un poco ecuatoriano, porque estuve viviendo allá, haciendo el programa Yo me llamo”, recuerda. Fue jurado en las dos primeras temporadas del reality de imitadores hecho por Teleamazonas.

“Para mí fue una experiencia extraordinaria, no solo por apreciar el talento que hay en el Ecuador, sino por el equipo humano que se formó en el canal y con los participantes, fueron meses de profunda alegría; con el jurado lo pasamos muy bien, nos reímos, disfrutamos, disfrutamos mucho con los productores y la gente que trabaja detrás de cámaras, que son el alma del programa; cuando voy y tengo la posibilidad de saludarlos, es como si no hubiéramos visto ayer”.

Ecuador, un país que sedujo a Alberto Plaza

Otra huella de su vínculo con nuestro país es el álbum de 2013 La mitad de mi mundo, con el respaldo del Ministerio de Cultura y Patrimonio. “Fue producido por mi querido amigo, Alfredo Che Vera; con artistas formidables hicimos versiones alucinantes de canciones que están instaladas en el inconsciente colectivo del Ecuador”. Entre ellas, Esta guitarra vieja con Juan Fernando Velasco; Corazones rotos con Mirella Cesa, Tanto tiempo con Israel Brito, Apostemos que me caso con Papayadada y Widinson, Basta con que estés con Paulina Aguirre, Vasija de barro con Mariela Condo, Dicen con Daniel Beta, Romance de mi destino con el Trío Pambil y Sombras con Gustavo Herrera. “Para mí fue un honor, lo hice con mucho respeto y humildad para una tierra que tiene una cantidad de música y de músicos espectaculares”.

Confiesa que no está muy enterado de la actualidad musical y de los charts. “Contrario a lo que podría pensarse, no soy de los que escuchan mucha música; más que nada, me dedico a la lectura. Curioso, porque siendo músico, debería estar todo el día escuchando, pero tal vez lo hago como una manera de no dejarme influir, de no copiar, de no perder originalidad”. Y también publicó un libro (Claro que no da lo mismo, 2018) y un guion de cine que está en etapa de ajustes, comparte. “Me gusta mucho escribir, la humanidad de las letras”. Se considera una mezcla de músico, poeta y escritor. “Y tendría que meter en la ecuación el hecho de ser cantante. ¿Qué es más importante?, yo no tengo la respuesta. Que la gente decida qué es lo que prefiere”.

En cuanto a los escenarios, explica por qué le atrae la experiencia acústica. “Es la cercanía, es poder interactuar; me encanta el formato, es minimalista: pocos músicos, no por ello poca música”.

Ecuador es el último destino del Tour Sin Fronteras, que Plaza describe como una etapa increíble. “Este ha sido uno de los mejores años de mi carrera, en lo laboral, en lo personal y familiar: nació mi hija Serena. En lo social hemos trabajado con la Fundación Voy a Cambiar el Mundo, que presido. Y en 2025 comenzaremos a celebrar los 40 años de carrera. Vamos a ir a más países, a celebrar a lo grande”.

Y su más grande proyecto, considera, es un nuevo disco que irá acompañado de un documental que se producirá en Estados Unidos. “No es un recopilatorio, son solo canciones nuevas. Verá la luz el próximo año”.

En eso consiste el camino del artista, opina, en estar produciendo constantemente. “Tener más proyectos que recuerdos, mirar hacia adelante, sin importar el tiempo que uno lleve trabajando o el tiempo que le quede por trabajar. Yo tengo muchos proyectos. Imagínate”, continúa, “tengo 62 años y una hija de 5 meses, un hijo de 4 años, una hija de 7; los mayores tienen 18 y 23. Teniendo niños tan chicos uno no tiene la posibilidad de sentir que es hora de bajar el ritmo, todo lo contrario. Las circunstancias de mi vida apuntan a que tengo que apurarme y ponerme más productivo”.

Si bien el Tour Sin Fronteras termina este sábado 7 de diciembre en Riobamba, Ecuador está en los planes de Alberto Plaza en 2025: en febrero estará en Quito. (E)

Fuente

Comparte esta noticia